Tener un colon sano no precisa de tés, laxantes ni enemas desintoxicantes. Lo ideal es seguir una dieta balanceada, que incluya abundante agua y fibra, y complementarla con el ejercicio.
Toda persona tiene una gran cantidad de bacterias “buenas” habitando normalmente en sus intestinos. Estas intervienen en procesos como la absorción de nutrientes y la protección contra enfermedades, por eso es importante mantener la “flora intestinal” saludable y esto se logra, básicamente, con una dieta baja en grasas y rica en fibra, como la que aportan los vegetales, frutas y cereales integrales.
Además, una evacuación regular y adecuada evita que toxinas que puedan encontrarse en alimentos procesados tengan mucho contacto con la mucosa en el colon y causen alteraciones. Beber suficiente agua favorece un adecuado movimiento colónico.
No obstante, desde hace varios años algunas celebridades han promovido la limpieza del colon mediante lavados o enemas detox, supuestamente para eliminar residuos acumulados en los intestinos, cuando realmente no se justifica, con una base científica, sus ventajas para desintoxicar el cuerpo. Estos lavados colónicos pueden, en cambio, alterar la flora bacteriana intestinal, advierte el doctor Luis Lambraño, jefe del Servicio de Gastroenterología del Hospital Santo Tomás. “La limpieza constante o excesiva del colon puede afectar la flora intestinal y causar problemas de inmunidad”.
Por otro lado, estas bacterias que viven en simbiosis con los humanos, cada vez cobran un mayor interés, porque se ha visto que no solo actúan localmente, también influyen en los neurotransmisores cerebrales.
Dietas, jugos, tés… son otras opciones que se publicitan para mantener limpio el colon. Al respecto, el doctor Lambraño hace hincapié en que las dietas de un solo alimento por determinada cantidad de días no son aconsejables, ya que una alimentación sana debe incluir todos los nutrientes para que el organismo funcione en forma óptima.
Los tés laxativos causan un exceso de evacuaciones y esto también altera el “ambiente” intestinal. Si la persona evacua normalmente, por lo menos una vez al día o cada dos días, según su ritmo, no debe recurrir a este tipo de producto. Si sufre de estreñimiento, quizás le ayude en forma ocasional un laxante suave, pero no es algo que deba tomar siempre. Lo ideal es modificar su dieta, añadiendo más fibra y agua. También es importante hacer ejercicio.
En el caso de los pacientes que se someten a una cirugía bariátrica, el colon no debe verse afectado, aunque algunos pueden experimentar un vaciamiento rápido; es decir, que comen y enseguida el alimento pasa al intestino, y si come mucho, puede tener diarreas. Pero si el paciente ha sido educado (como debe ser cuando se le va a hacer un procedimiento de este tipo) sabe que debe comer porciones pequeñas en forma repetida y no debe tener estos síntomas.
Fuente: prensa.com